Experiencia brasilera durante las elecciones
Resulta que a mi señora le tocó ser vocal de mesa. A partir de eso edifiqué mi plan maestro cachero para aquel Domingo. 7:30 y la bruja parte a cumplir con la Ley. Como las 10 levanto a los niños y los llevo a casa de mi suegra. Tenía que ir a buscarlos como las 4, tiempo había. Arreglo rapidito la casa en especial la habitación matrimonial y el baño. Saco las fotos familiares, pongo algo de música y la llamo. Mientras me confirma preparo otras cosas y me ducho. A eso de las 1:20 tocan el timbre y aparece ella, Luana, una espectacular universitaria brasilera. La gracia me sale 60 lucas, pero aquella hembra los vale. Su sola presencia ya me tiene loco: trigueña de cabellos castaños y ondulados, de unos 21 añitos, un rostro de modelo inalcanzable dentro de su 1,65 de estatura, vestida con un petito simple y jeans ajustados, lo que dejaba apreciar un cuerpo atlético y un espléndido culo. Todo va según mis indicaciones, lo cual incluía que la mina llegara solita en taxi y en plan de vestimenta recatada, por eso de los vecinos, no falta la vieja sapa en todos lados…
En esto hay que ser vivo. Si bien todas las chicas tienen su celular para comunicación directa, siempre llamo primero al manager de la página y le consulto por los servicios y por alguna chica que sea dato calado. En ese sentido, Luana coincidía entre lo que el tipo sugirió y mis gustos personales. No pude dejar de pensar en quizás cuantas muñecas habría degustado ese tipo gracias a aquel “trabajo”. Quien fuera dueño de agencia…
Le ofresco una bebida. Me indica que se servirá “so un jugo, gracias, para conservar la línha”, en un portuñol mas que ardiente. Le digo que soy soltero, ella dice que no me cree pero no importa, ella solo hace su trabajo y ya. Eso me gusta. Me pregunta donde quiere que lo hagamos, a mi se me ocurre la casa entera, pero solo tengo una hora y la llevo directo a la matrimonial, que está lista para la ocasión, con música, algo de incienso, y dos marcas de forritos para que ella misma elija: “Eu prefiero los míos, espero nao te moleste bebe”, me dice, mientras me doy cuenta que si bien estoy en mi casa, tamaña hembra me cohíbe cada vez más.
A esa altura ya estaba totalmente erecto. Me desvisto de una, mientras la tomo por la cintura mientras ella se quita las calzas, jeans y peto…el colales y tatuaje de la espalda no pueden ser más incitantes. Comienzo por acariciarla entera, pero la mina no colabora mucho y me tira varias “normas”, las típicas lateras en este nivel de escorts: no da besos, no hace americana, no hace oral sin condón…algo me decía que la minita sería complicada.
Le empiezo a besar sus gomas operadas, deteniéndome en aquellos ricos pezones. Cuando bajo mi mano a su bellísima zorrita con forma de mohicano, me dice que no le introduzca los dedos. Esto se podía cada vez más fome. Aplica preservativo y comienza una mamada de nota 4, demasiada superficial, solo por cumplir y mal…de lenguetearme las bolas ni hablar. La pongo entonces a lo misionero. Ella me abre sus espectaculares muslos ante mi vertical chuto y se la empiezo a meter. Tener a aquella muñeca garota así es un lujo, pienso. Llego a mi tope, pero no siento demasiado apretado mi miembro. La muy perra se había aplicado demasiado lubricante… Taladreo todo lo que puedo, mas de 15 minutos dándole, pero no puedo llegar. Ella apenas gime algo así como “Ohh que rico papi, vocé é muito caliente”. Su falta de ardor y negativas me tienen a medio camino… en eso se me baja, no puedo creer tanta mala suerte. Su “¿Que vai bebe? Se te bajó?” más me desmotivan y dejan reducido mi pene, flotando en el plástico sobrante.
Le digo que tenemos poco feeling y ella es muy mecánica. Hace como que no entiende y mira su teléfono. Le indico entonces que necesito otra mamada para volver a culiar. La muy zorra me dice entonces que “son 10 mil adicionais pelo segunda oral “. Esto ya estaba color de hormiga. Se los pago y guarda el billete en su pequeña cartera. Cambiamos condón y empieza. La verdad la mina no está ni ahí…en eso la llama otro caliente y le dice q está ocupada, pero que en 20 minutos mas le devolvía el llamado. ¡20 minutos¡
Ya estaba chato. Así que utilizo la ultima carta que me quedaba. El manager de la página me había dicho que Luana hacía unos excelentes grecos, obviamente por un monto extra. Con ese culo tan rico, era una estupidez no consultarle, así que le consulto que cuanto por su cola. Siento como la perra se sorprende de mi petición. De seguro pensó “a este a penas se le para y quiere meterla por el chico”… me dice que 30 lucas mas. Se los pago. Si hay algo que me motiva en esta vida son los culos y uno como el de Luana no se me escaparía, menos de local y con lo que estaba pagando. Se pone en cuatro mientras me estimulo yo mismo y aprovecho de mirarla en detalle: la forma de su asterisco, de tono escuro pero lozano, sus nalgas son perfectas y apretaditas y y su vagina tiene unos delicados vellos. El tatuaje en forma de flor me calienta caleta. Poco a poco comienza a crecer en mí el fuego de la pasión prohibida y de la oportunidad que no se debe desaprovechar, y me renace por completo el ave fénix. El ver como esta exquisita brasilera se pasa el par de dedos lubricados por su gruta me prende. “Ya estoy listo”, le digo.
Entonces la preciosa meretriz se acomoda y ubica mi herramienta a la entrada de su ano. “Ok, vejo q estas listo”, me dice. “Acá me desquito yo”, pienso. La chica relaja su juvenil esfínter y me guía para introducirle la cabeza de mi pene en su arterisco, que cosa más exquisita… aquella incomodidad y sufrimiento de la mina al tragárselo vía anal me prende, debo reconocerlo. Si bien las 30 lucas extra crean la disponibilidad de la mina, se que el practicarlo es otra cosa. Pero el trato está hecho y se la sigo metiendo lentamente hasta entrar a medio camino de mi miembro. Sus quejidos son música para mis oídos. “Agora muevete pero despacio, bebe” me indica, apenas. Increíblemente llego hasta el tope de mis bolas y comienzo lentamente a aumentar el ritmo de la enculada… la mina lo recibe estoicamente, me contengo para que Luana no se me enoje y me retire el hoyito, pero luego la afirmo fuerte de sus caderas y ya no me pudo contener, la bombeo cada vez mas duro hasta que me duele la pelvis y mis bolas se agolpan desbocadas en su entrepierna… “¡uo ohhh uoou!” se queja la perrita extranjera, escucho otras palabras que no entiendo, reconociendo solo un par de “!!auu merda¡¡” y “!!auu meu deus¡¡… hasta que estallo y lleno por completo el forrito dentro de ella…la misión está cumplida.
Descansamos, acostaditos juntos. Le robo un beso a Luana. “Er no final você repusiste, bellaco ¿eh?”, me dice la minita recién culiada y con su pobre ojete adolorido… “Uff foi duro, amor”. Yo quedo mas que satisfecho. En total son 90 lucas gastadas en ella, es lo menos que podía entregarme…
Nos cambiamos, ella pasa al baño. Escucho que me dice “o passe muito bom com você, eu novamente llamaras, carinho?. Yo le digo que sí, mientras miro la hora y pienso en buscar otra mina para cuando tenga el tiempo y la plata. Total, la brasilera exquisita ya fue.
