Sábado 18/08
ANGELA
Edad: 20 y pocos
Internet: La logia
Inversión: 30 mil hora servicios normales
Ubicación: Conce, cerca del centro
Lugar: Depto
Tipo: Independiente
Conserje: No
Fono: 76507890
Horarios: Lunes a viernes hasta las 20:00. Otros horarios, concertar con ella. Agendar con anticipación. No se reciben califas de última hora.
Nivel de empotamiento: creciente, espero controlarlo
Estatura: 168 cm
Contextura: 6.8 alta, delgada, curvilínea, ricas piernas y caderas, una mina muy rica
Cara: 6.5 hermosa
Nivel de Phothoshop: 0%
Trato: 7.0 mi polola
Besos: 7.0 muy golosa
Tetas: 6.5 medianas, firmes y suaves
Culo: 6.8 exquisito, redondeado, firme, durito
Pussy: 6.8 depiladita, suavecita, jugosita, apretadita
Oral: 6.8 sin forro sólo con buena higiene previa. Succión asesina, garganta profunda, americana casi completa
Movimientos pelvicos: 6.8 no había como pararla. Exquisita ella
Calidad de sonido: 6.8 gemidos, quejidos, gritos de placer... me tenía loco, no solo por la intensidad de los mismos, sino por saber que eran totalmente reales. Una mujer puede simular, pero una vagina siempre dirá la verdad
Anal: no aplica
Ambiente: 6.5 depto cerca del centro, piola, limpio, amplio, bien equipado, todo OK
Atención: 7.0 pero si pudiese poner un 10 lo haría.
Otra vez un sábado. Es el único día de la semana en que me queda tiempo. O al menos, eso pensaba. Quería juntarme con Angela bien temprano en la mañana, pero una reunión de emergencia con una tropa de trabajólicos sin vida me dejó libre recién a las 11:30. Lo primero que hice fue partir rápido al depto de Angela. Apenas crucé la puerta, nos besamos golosamente, para ponernos al día tras tanto tiempo sin vernos. Luego, su duchita de rigor y a la camita. Nos besamos como desesperados mientras la desvestía. Antes de poder poner un cm de lengua sobre su cuerpecito, ella se apoderó de mi compañero y se lo tragó ante mis ojos atónitos. Desesperado, tomé sus caderitas y me sumergí en su pussy, devorándola mientras escuchaba sus gemiditos de placer. Luego nos besamos y acariciamos tiernamente como pololos, hasta volver a sumergirme entre sus piernas, devorando sus labios y clítoris cada vez mas mojados, hasta hacerla acabar entre sus gemidos y grititos de placer... mi pobre compañero pagó las consecuencias, siendo devorado sin compasión hasta los coquimbanos. Angelita me dejó loco al invitarme golosamente a penetrarla en 4... la vista de esa colita celestialmente redondeada al borde de la cama fue un paraiso para mí. La penetré golosa e intensamente, culeándola rico por bastante tiempo, hasta recostarnos de lado en la cama, disfrutando de culearla en cucharita, rematando con un misionero exquisito, penetrándola sin control hasta acabar juntos. Nos regaloneamos dulcemente, descubriendo con placer su refinado gusto musical. Nada de mierdatón ni bachata, sólo buen rock. Me enamoré al toque, y se lo hice saber regalándole todo el placer y todas las penetraciones que pude en esa segunda patita. De lado, a la paraguaya, cabalgando, misionero, rematando -era que no- en 4, penetrándola sin parar hasta ver la luz. Nos duchamos juntitos, acariciándonos y besándonos golosamente, mientras enjabonaba sus tetitas y su cola. Nos despedimos sin querer detenernos, prometiendo volver a vernos.
El que no va a verla no sabe de lo que se pierde
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