Por mi trabajo, trato con muchas personas.
Veo a mí alrededor, y últimamente lo que veo en las personas.
Es una necesidad imperiosa de amar y ser amado.
Todo el mundo quiere ser amado y todo el mundo quiere estar amando. Pero una mayoría no saben cómo amar.
Las personas caminan con heridas acumuladas, con miedos insertados, con dudas sobre si mismos, con carencias afectivas.
Y este es el motivo, de que no siempre sepan como amar y recibir amor, aunque lo deseen más que nada en el mundo.
¿Sabemos lo que es el amor? ¿Nos sabemos amar, a nosotros primero, en forma sana? ¿Sabemos aceptar a las personas, como son, y no como nos gustaría que fueran?
¿Aspiramos a dar, incluso más que a recibir?
¿Somos capaces de darnos cuenta, como el amor es ilimitado, y se puede sentir hacia muchos seres, animales, niños, hombres, mujeres?
¿Nos percatamos de que cada amor, hacia cada ser es diferente? No amas a una sola persona, igual que a otra, jamás.
Pero siempre hay alguien, que remueve tu corazón, en una forma especial. Alguien que te hace vibrar las células y te emociona, como no hacen otros. Esto se suele dar más en el amor de pareja.
El amor de pareja, suele ser vibrante, extasiarte, emocionante, embriagador.
Sin embargo hacia un hijo, puede ser protector, nutrido, tierno, así como hacia un animal.
Hacia una amiga, puede ser un amor de complicidad, de gran cariño, de ternura.
Cada tipo de amor, porta una chispa de la esencia que somos.
Me he dado cuenta en mi trato, con las personas.
Que las mujeres se han masculinizado más en su forma de actuar, han tomado acción, mando, y formas y actitudes que hasta hace poco eran más del hombre.
Y los hombres una mayoría, han activado mas sus lados femeninos, han pasado más a la pasividad, a nutrir y han dejado un tanto de lado su energía de coraje, valentía y fuerza.
Esto es algo que estoy observando últimamente en mi trabajo.
Las polaridades están cambiando en los diferentes sexos.
Todo pasa por extremos, hasta que se haga el ajuste en el medio, el equilibrio. Y todos porten ambas energías en armonía.
Pero hay muchas cosas que en hombres y mujeres es lo mismo.
El querer dar amor, el querer ser amados.
Veo hombres y mujeres, con unas carencias afectivas tremendas.
Mujeres que se agarran a cualquier hombre, con tal de tener una pareja, y hombres que se agarran a cualquier mujer, con tal de pensar que tienen a alguien.
Mujeres y hombres que traicionan sus propios sentimientos, o que se encadenan a personas, que no les corresponden con su amor.
No podemos amar sanamente, ni ser amados sanamente, si primeramente no nos respetamos y amamos a nosotros mismos primero.
Para amar hay que amarse, y seguido tener la valentía de seguir al corazón, pero a la vez a ese corazón, unir la mente para discernir, a quien haces entrega de tu corazón.
En este momento, muchos hombres me inspiran enorme ternura.
Sobre todo cuando veo hombres con niños internos heridos, o mujeres en la misma situación. Me darían ganas de darlos un enorme abrazo y decirles. Te amo.
Y no te pido nada, no quiero nada, no espero nada. Solo te amo.
Solo estoy emanando amor hacia ti. Preguntar a cualquier persona, ¿si le podéis mandar amor? Hablarla desde vuestro sentir más profundo. Pocas son las personas que os dirán que no.
Las personas están como están, por las heridas que van cargando, por la desconfianza en que se mueven hacia otros seres, por caminar en luchas de poder que establecen desde sus egos, y por ir desde la mente, en lugar de desde el corazón. Por los patrones y creencias autoimpuestos que llevan basándose en relaciones anteriores que quizás no les funcionaron, y establecen defensas, basándose en eso vivido, sin darse cuenta, que cada persona que aparece en sus vidas es nueva, y nadie debería pagar lo de otro alguien.
Esto es simplemente algo que escribo, en base a lo que he ido observando.
Es tiempo de cambiar en la mente de todos, el odio por amor.
Como dice la canción.
Y es tiempo de empezar a vivir sintiendo, en lugar de ir con las defensas, corazas y armaduras, que el ego hace, para protegerse de que le dañen, sin darse cuenta que cuando intenta protegerse de que le dañen, cierra el paso también a lo que más desea, el amor. Amar y ser amado.
Aquí dejo este post, para que todos reflexionemos, y pensemos por un momento, que solo hay un tiempo para amar y ser amado, y ese tiempo es hoy, aquí y ahora.
Ama como quieras amar pero recuérdalo en cada poso que das
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