Partes 2 y 3. Martes 20 Nov.
El lunes a la salida de la pega pasé a La Mansión a coordinar el cobro del resto del premio para el día siguiente, martes. Las chicas y los dueños de casa me
recibieron con muy buena onda, y allí me enteré las razones de porqué Carolita y Daniela no habían podido acudir a la cita del sábado. Obviamente que las perdoné, pero solo se me ocurría una manera de ponerme de buenas con Carolina y se lo hice saber. Para evitar problemas de logística como los del sábado, quedamos en que cobraría el resto del premio el martes en la tarde, en principio con Carolina y Flor (Dani aún estaba ausente), pero si surgían problemas, el cobro sería con las chivas que estuviesen disponibles en el momento.
El martes a las 5 y media llegué a La Mansión, donde me recibió Marcelita, de regreso tras una corta ausencia. Saludé a Tatty y carolita, y me enteré que Flor no estaba debido a que tenía asuntos personales que atender, y que Dani estaba ocupada y que debía irse temprano. Pero Carolita me esperaba lista, así que tras compartir un rato con las chicas, me fuí a una de las habitaciones que dan al patio, y tras una refrescante ducha, esperé a Carolina en mi estilo.
Ella llegó al poco rato y también le encantó mi bienvenida. Caro se veía impresionante con un pequeño conjunto de lencería, incluyendo unas diminutas pantaletas enmarcando su exquisita cola. Sumando a eso un cuerpazo alucinante y una carita de muñeca... estábamos dados papá!


CAROLINA
Edad: 22 años.
Lugar: La Mansión
Tipo: Agencia
Ubicación: Concepción, Rengo c/ Prieto
Horario: Lunes a sábado de 13:00 a 18:00

Descripción física: Alta, curvilínea, delgada, hermoso rostro y ojos, pelo castaño liso largo, labios carnosos, caderas torneadas, cola paradita y durita. Pussy depilada, pechos medianos, con leve caída. Piel suave y tersa. Un poco de guatita.

Descripción servicio: Respetuosa con el tiempo. Oral sin preservativo (solo con buena higiene previa), garganta profunda. Permite sexo oral pero no introducir dedos. Apasionada y con iniciativa en la cama, le gusta moverse y cambiar posiciones. No practica sexo anal. Estilo pololita, para tirar delicada y apasionadamente.

Aspectos positivos: cariñosa, apasionada, mucha iniciativa en la cama, simpática, risueña, conversadora.
Aspectos negativos: en esta ocasión ninguno, solo que el tiempo pasó demasiado rápido

Prestaciones del lugar: habitaciones individuales, con baño propio y compartido. Toalla limpia, baño bien aseado y equipado (jabón líquido, ducha caliente), preservativos de buena calidad, aportados por la casa.

Carola puso música, y comenzamos a besarnos apasionadamente mientras la desvestía, con la misma ansiedad nerviosa de cabro chico abriendo un regalo. Mis ojos se perdieron en ese cuerpo exquisito, pero se fueron a la chucha cuando se fijaron en la preciosa carita de Carola. Es linda esta chica, la cagó. La besé golosamente por todo su cuerpo, disfrutando con cada cm de su piel, hasta que me sumergí en su chochita depilada y suave. Sabía que tenía poco tiempo, y que jamás alcanzaría mi sueño de hacerla acabar en pocos minutos, así que me dediqué a disfrutar de la compañía de Carolina sin hacerme atados. Nos revolcamos sobre la cama besándonos, y saboreé sus tetitas casi con tanta dedicación como cuando me comí su chochita una y otra vez. Cuando pensaba que nada podía ser mas perfecto, Carola se despegó de mis labios, y recostándose a mi lado, devoró al pequeño con una voracidad exquisita. Lo saboreaba con la punta de la lengua, se lo tragaba completo, me lo chupaba mientras me miraba con sus ojitos... un placer celestial de principio a fin. Me di el gusto de masturbarla mientras tanto, gozando con cada uno de sus suaves gemidos. Luego, con ambos de rodillas sobre la cama, y yo detrás de su espalda, la punteé descaradamente, estirando mis manos para masturbarla nuevamente, mientras acariciaba sus senos. Carito dió vuelta su rostro hacia mí, y nos besamos larga y golosamente.
Luego de enfundar al pequeño, me tendí de espaldas. Algo me decía que no la dejase subirse, que ella era peligrosa arriba, pero filo... a los pocos segundos
estaba culeándomela rico, penetrándola una y otra vez mientras agarraba sus nalgas, gozando del espectáculo de Carolina cabalgando sobre la presa. Mi boca saltaba de sus pezones a su boca y viceversa. La vez anterior había cogido suave y tiernamente con Carola. Ahora disfruté de su lado mas hot. Caro saltaba sobre mi pobre compañero, giraba sus caderitas, gemía rico y cerraba sus ojitos. No sé cuanto estuvimos en esa, pero mantuve el control y tomándola en brazos, culeamos rico contra la ventana, con ella en mis brazos, y de ahí de regreso a la cama, a lo misionero. Caro se aferraba de mi espalda, me besaba entre sus gemidos, yo saboreaba sus tetitas, y miraba hacia su entrepierna para ver como la penetraba una y otra vez. Yo estaba alucinado. cambiamos una y otra vez de posición, de lado, cucharita, en 4... con Caro quejándose rico, la cogí en doggystyle por largo tiempo, alargando mis manos para masturbarla o masajear sus pechos, y luego me alejaba, cogiéndola de las caderas mientras la culeaba, y así hasta explotar entre sus gemidos.
Nos abrazamos y besamos sobre la cama, conversando abrazaditos los pocos minutos que nos quedaban. Tocaron la puerta y nos despedimos largamente.

Aún faltaba la tercera parte del premio. No estaban ni Flor ni Daniela, y decidí optar por Marcelita. Fue una de las mejores decisiones que pude tomar, aunque a la larga influyó en mis planes futuros. Mientras me recuperaba de mi encuentro con Caro, apareció Marce en la pieza. Se veía muy rica con un diminuto babydoll y su pelo negro largo, enmarcando su preciosa sonrisa. Le pedí unos minutos para ducharme, así que apliqué aseo de rigor para recuperarme.
Volví a la habitación justo cuando Marce regresaba.