A los 10 años de edad el "tío" del negocio de la esquina del colegio me besó, me regaló unos chocolates y me dijo que era un secreto de los dos, que estábamos pololeando. No recuerdo si el mismo día o al día siguiente llegué a la casa de mi abuela, no recuerdo como llegamos al tema y le conté mi secreto... que tenía "pololo".
Todavía recuerdo su tono de voz, como cambió de estar conversando al interrogatorio que me hizo después, me tomó y me llevó donde mi mamá, después nos fuimos las tres al colegio a hablar con mi profesor jefe, luego con el director, yo no entendía nada, pensé que las había cagado al contar el secreto, luego llegó carabineros al colegio, me dejaron con una inspectora y se fueron a hablar con "el tío" del negocio. Se me funó el pololeo, me prohibieron volver a pasar al negocio, me iban a dejar y a buscar, yo estaba en quinto básico por lo que me molestaba ver a alguno de mis famliliares a fuera del colegio esperándome.
Luego me enteré, (al menos 2 ó 3 años después) que "el tío" había tenido varias denuncias por violación e incluso había estado preso por lo mismo.