Es cosa de acostumbrarse, y no espara nada traumático llamar las personas por su nombre o anteponer el don o señora xxxx.

la relación de cariño se debe dar en la casa y los chicos deben reconocer esta diferencia.

En la medida que exista esta diferenciación será mucho más fácil detectar anomalías cuando un "tío o tía" es muy cariñoso.