Quién te dijo que no tengo desarrollado mi lado femenino. A mis treinta y tontos años, sé lo que no quiero y no estoy ni ahí con hacerme el lindo (imposible jaja) pa darle el gusto a una mina, me gusta ser yo. Me encantan, pero no juego por jugar y el don de fluir es lo que prefiero buscar.
Marcadores