Los cafes con piernas así como los moteles son demostraciones empíricas del doble estandar del chileno.

Hace mucho, un forerito llamado Mulato (Que el Cafetero Universal lo tenga en su reino), decía que los clientes sólo somos consumo y propina para ellas. Y no deja de tener razón.

Personalmente, voy a los cafes a mirar y pasar un momento agradable, pero no aspiro a más.

Si bien reconozco, que a veces me hago un poco el galán y todo eso, es sólo un juego, porque tengo claro que para las chicas del rubro su trabajo es parte de un negocio, y vincularse sentimentalmente con los clientes es perjudicial para el mismo.

Ahora bien, me confieso que soy de los que trata siempre de hacerle un engañito a las chicas con las que tengo más onda, pero no es para llevarmelas a la cama (Nunca me he vinculado con una chica de cafes), desde chico mi forma de demostrar cariño es esa, más que otra cosa.

Pero no entiendo que chicas les saquen un auto o un departamento a un cliente "pavo", como si conocí. O a chantas que embauquen a las chicas con cuentos de amor eterno y otros derroteros.

Imprimir un post y llevarselo a la chica es de lo más bajo. Así como crear rumores mala leche si ella no quiso salir contigo.

Como sea, el mundo cafetil es como cualquier otra actividad humana. Hay cosas buenas y otras malas. Hay cosas malas y otras bizarras. Hay de TODO.

Amén