Un hombre se encuentra con un amigo al que no veia desde hacia varios años. Le pregunta que tal le va y aquel, muy apesadumbrado, le contesta:

- Se acaba de morir mi padre y vengo del entierro.

El amigo, para tratar de consolarle y aliviar su pena, le dice:

- Vamos hombre, no te lo tomes asi... ¡A lo mejor ni era tu padre!