UUuuuuffff mi historia ocurre en un extinto café de 10/7, había una musa llamada Luna, preciosa, rubia, cuerpo increible, simpática... y caliente como nadie!

Era cliente frecuente de ella, y vaya que gastaba en que me atendiera, pero los valía! Siempre se preocupaba de atenderme como nadie hasta que el niño llorara, y la última vez que la vi, nos atendimos en privado para un enfrentamiento mano a mano... Hizo un excelente servicio hasta que el niño lloró... la parte cuática es que el material que saltó a distancia le cayó ahí mismo en sus partes bajas mientras le seguía haciendo su papanicolau, y ella siguió como si nada!

Ahí caché que la mina era realmente brava, y hasta me llegó a preocupar lo salvaje que era... osea, la experiencia fue increíble, y me casaría con una mujer así, pero en esas circunstancias da para pensar.

Luego este café cambió, y nunca más la volví a ver.

Fin!