Estuve un rato pensando como comenzar este relato y solo puedo comenzar diciendo su nombre:
Katalina, la dulce y fogosa niña-mujer.
Era la mañana del viernes, cuando comienzo con esta incierta travesía. Llamo a su teléfono, pero lamentablemente no contesta ella, amablemente me contesta Elektra y me dice que llega como a las 13:00, llamo nuevamente a las 13:10 y nuevamente me contesta Elektra y me dice, lo siento aun no llega….y lo mejor de todo, me dice si quieres te pincho cuando llegue. Así lo hizo…(que linda ella). El problema es que eran casi las 15:00, pero la espera valió la pena de todas maneras.
Llegando a los aposentos, me abre la puerta la Katalina con una carita de niña buena, pero uffff que equivocado que estaba, paso a la duchita, saludo a la pasada a Elektra, vuelvo y katita estaba en la pieza grande vestida de escolar tipo Santiago College pero en versión hot….Y comienza la fiesta, literalmente me come a besos, sus labios, su lengua, su respiración agitada, inundaban mi boca y mis sentidos, que besos más ricos entrega. Con un comienzo así….lo siguiente se veía venir muy bueno.
Ya con la maquinaria encendida y entre besos caricias nos desvestimos hasta quedar completamente desnudos. Hay katita me agarra y me tira sobre la cama, se posa sobre mi y comienza a besarme, mientras nuestros cuerpos se rosaban delicadamente al principio, llegando a niveles insospechados y peligrosos para nuestro primer encuentro. Luego ella baja donde Evito y comienza a jugar delicadamente con él. Que experiencia es ver su performance que comienza suave y delicada hasta un punto en que literalmente tienes que quitárselo de la boca. Luego toca mi turno de jugar con ella. Una gran experiencia para ambos sentir como a cada caricia de mi boca y mi lengua, se humedecía lentamente a tal punto de verla contornearse sobre la cama con una pasión que demostraba que estaba gonzando la incursión, me agarraba la cabeza, me apretaba contra ella, llegando a tal punto que su humedad era extrema y tuvimos que ocupar la fiel y oportuna nova. En este punto la experiencia ya era sublime pero quedaba lo mejor, ya que ambos estábamos a full y esperando la maravillosa conclusión de estar dentro de ella. Toma a Evito lo enfunda , lo acaricia y se sienta sobre el……Uffff que exquisito verla contornearse lentamente, mientras me decía….espera un poquito para acostumbrarme a ti, que puedo decir, creo que estábamos tan caliente que era una consecuencia inevitable pasarlo tan bien como lo pasamos.
Katalina. Solo puedo decirte que eres una mujer exquisita, contigo las palabras sobran, solo hace falta sentir tus labios, tu cuerpo junto al mío y las caricias sublimes que desplegabas por mi cuerpo. Me sentí embriagado de ti, de tu cuerpo y del placer de recorrer cada parte de tu cuerpo con una fragancia dulce y sincera.
Y la tablita: en todo (7.0.)
Fono: llamar a plataforma.
Salu2





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