Estimados logianos (as):

Quiero compartir una experiencia que tuve hace algunos años atrás con una niña escort.
A esta niña, la conocí un día en un hospital, puesto a que trabajo en salud y esta chiquilla un buen día llegó como alumna en práctica a un servicio clínico en donde yo trabajaba. La invité a salir, nos conocimos y posteriormente a eso pasó el tiempo muy rápido y entablamos una relación amorosa muy linda; yo de verdad me había enamorado de ella y era mutuo.

Al cabo de varios meses de linda relación, un buen día un amigo perverso, me invitó a visitar a unas niñitas del mundo escorteril, a esas alturas yo estaba alejado de las pistas; pero por lo macho carnal y califa que soy accedí a tan tentadora invitación. Fuimos a visitar a un par de niñas que trabajaban en un Dpto. Llegamos al lugar para cumplir con nuestros más oscuros deseos, pero al llegar al lugar ocurre un problema de grandes dimenciones, primero nos abre la puerta una niña (la que conocía a mi amigo) y mientras nos estábamos saludando, aparece la otra niña y la sorpresa fue del tamaño de un crucero... era mi "polola", el momento fue uno de los más tensos que me ha tocado experimentar, varios meses viví bajo el engaño de esta niña, la cual me decía que tenía un trabajo de media jornada y que recibía la ayuda económica de un familiar que vivía en el extranjero, que con esto vivía ella y su hijo.

Los pormenores del momento y los dime que te diré me los reservo, pero demás está decirles que para mí fue un golpe directo a corazón y a mi rábanos.

A posterior de ese día fatal, nos juntamos y ella me contó que llevaba un par de años trabajando de escort, que su vida era complicada en el tema económico y por eso decidió tomar el camino escorteril... me dijo que estaba a punto de retirarse (hasta que terminase su carrera) me pidió que la perdonara, que nunca fue su intención hacerme daño, que se saldría de una de esa vida si continuaba o nuestro, a lo cual mi corazón de melón decidió que no.

Después de esto, ella se retiró del ambiente (supuestamente), pero igual seguimos teniendo contacto por teléfono y mail, ya que debo reconocer que me encariñé de sobremanera de su hijito, pero al pasar de las semanas y los meses, me distancié y el contacto fue decayendo hasta llegar a nada.

Para mí fue muy doloroso el tema, pero para balancear el asunto también debo reconocer que tal vez eso me pasó por califa, al dejarme influenciar por un compañero de batallas e ir a visitar amigas escort; pero si no hubiese accedido, quizá nunca me hubiese dado cuenta de lo que pasaba a mis espaldas... ¿cosa del destino no?

A diferencia de algunos compañeros logianos, mi historia difiere un poco, ya que mas de alguno se enamoró de una escort conocida, pero mi caso es que me enamoré de una mujer que era escort pero yo no lo sabía...

Para terminar quiero felicitar a Rodrigo Z por el excelente tema.

Nota: acepto comentarios, sugerencia, escupos y demaces...

Un saludo a todos los logianos (as) del foro.

El Pepe