bienvenido hijo mio, pero no comulgo con su culto, de lejos no mas con ud ppor traicionero
estimado padre si no existiera el mal , el bien no podria existir.
Solo keda coexistir
en lo oculto esta el placer
Por mucho que sepamos, siempre habrá una pregunta sin responder. Y ese espacio de misterio inevitablemente invitará a cierto misticismo.
Marcadores